Este pasado sábado, la Escuela Fernando Baquedano se llenó de alegría y risas mientras celebrábamos el Día de los Adultos Mayores. Fue una jornada llena de momentos especiales y, sobre todo, mucho cariño.
Nuestras personas mayores demostraron que la vitalidad no tiene edad, bailaron con entusiasmo y disfrutaron de la música y la compañía de amigos y familiares.
Fue un día para celebrar la sabiduría y la experiencia que nuestros adultos mayores aportan a nuestra comunidad. Sus historias y enseñanzas son un tesoro que atesoramos y respetamos.
Gracias a todos los que participaron y ayudaron a que este día fuera inolvidable. Un agradecimiento especial a los voluntarios, a nuestros funcionarios, y a todas las familias que se unieron a la celebración.
Los abrazos y las sonrisas compartidas son un testimonio de que el amor y el respeto hacia nuestros adultos mayores es algo que merece ser celebrado todos los días. 
¡Hasta el próximo año! 
